La mirada encontrada, esa búsqueda de entendimiento, y que es invisible ante quienes nos rodean.
Algo nace, un destello infinito que se pierde entre el inmenso espacio que nos separa.
Casualidad.
El momento en el que estamos unidos por nuestras miradas, parece una eternidad. Un instante de felicidad no buscada que termina tan brevemente como ocurre, ese lazo invisible que ahora nos une, esta vivo esperando que nuestras miradas vuelvan a juntarse.
Curiosidad, atracción y pánico todo junto.
La tentación nos hace buscar esa mirada, y que tambien sea correspondida.
El lazo se vuelve mas fuerte cada vez que nos devolvemos la mirada.
Es entonces cuando aparecen las posiblidades en mi imaginación, que tiene alas mas grandes que el cielo mismo. Esa mirada encierra un futuro indescifrable, y soy el unico que puede predecirlo.
¿Amor?
Sin embargo se muy bien que esos ojos que encandilan mi existencia, finalmente iran a brillar a otro lado, a otras personas y a otras realidades.
Olvido.
Es ahi cuando ese lazo invisible se corta, los recuerdos que tarde o temprano se iran es lo único que me queda.
Pronto quedaremos ambos en el olvido del otro, incluso teniendo un momento que compartimos tan efimero como personal.
Y es que el tiempo cruel, siempre lo fue y siempre lo sera. Porque todo termina, incluso la eternidad.
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